miércoles, 15 de diciembre de 2010

Recuerdos

Había días en ese 4to año de primaria donde sentía que todo era posible, no sé si era el aroma a libro nuevo, las rayitas azules de las hojas o la astucia y alegría de la profe Gloria. Simplemente, recuerdo casi perfecto la sensación, tengo presente ese orgullo expresivo. Todo el futuro por delante, toda esa incertidumbre que se convertiría en todo caso, en algo nuevo, maravilloso. Una nueva historia para el mundo entero.

¿Les ha pasado que tienen sentires mucho más claros que las ideas? a mí me pasa seguido, sobretodo con los recuerdos. Hay quienes recuerdan aromas, de repente, les llega esa brisa del perfume que compraron en 1996. A mí me pasó alguna vez.

Lo bonito de aquel día en el colegio, o mejor dicho, de aquellos días en 4to año de primaria cuando prefería narrar historias "sin fin" mientras otros dibujaban. No me lo puedo sacar de la mente, y sé que ya no tengo 8 años pero me siento igual, me gusta sentirme así. Me gusta sentirme con sensaciones tan añejas aunque recientemente haya cumplido 24.

En el fondo, siempre seré la misma niña alegre y emblemática que soñaba con conquistar el mundo. Aún prefiero mirar la ventana cada vez que alguien pone una tabla numérica en mi mesa; todo es tan real, existe un propósito detrás, dentro, entre todo este universo. No me esmero en descubrirlo o descifrarlo, me uno a él en un camino lleno de episodios, personajes, melancolías, triunfos y fracasos.

Me siento bien de haber logrado unas cuantas cosas, me siento mejor (a pesar de los trancazos) de no haber perdido mi esencia, porque déjenme decirles que eso sí es un gran triunfo en la vida.