lunes, 17 de marzo de 2008

El sistema me odia y yo también odio al sistema. Me he dado cuenta de que soy una persona medio odiosa y un poco loca... en serio, el otro día estaba juzgando las locuras e intensidades de mis compañeras de clase y hubo un instante en donde me quedé pensando "creo que no soy yo quien debería de juzgarles" es que, en sí, a casi todas las viejas de mi carrera parece que nos cortaron con la misma tijera: egocéntricas, irreverentes, divas, chingonas y creyendonos la puta madre encuerada. Chale, lo más culero de todo quizá es que tengo los senos y las trompas de falopio para reconocerlo. Hoy llegué a la conclusión de que al pito pito y a la pepa... panocha! por eso como que ya no me malviajo. Total, mis hormonas están rotunda y completamente out of control.
No sé por qué tuve que nacer mujer y tan complicada... ser mujer es una de esas cosas maravillosamente caóticas. En serio, hay cosas que nos suceden que a un hombre jamás le sucederían (no me refiero a la menstruación) en cuestión de actitudes o imágenes mentales que tenemos muy bien clavadas desde tiempos de Adan y Eva. O sea, está cabrón esa cuestión de que verdaderamente en términos generales sí vemos las cosas muy diferentes... digo, yo tengo un fuerte lado varonil en cuestiones de rudeza y esas cosas... solo que a veces mis hormonas son como una navaja clavada en mi vientre. Derrepente siento esas efusivas y neuróticas ganas de aventar mi celular o de ese clásico "¡No me toques, pendejo!" o de enamorarme platónicamente de ciertos maestros.
Me encuentro la mayor parte del tiempo en una lucha constante con mis hormonas, lucho y lucho contra ésta fémina endorfina que corre por mis venas y me grita "Vamos, sé dramática, llora, gritale a todos y corre lejos... anda, sé una neurótica... anda, anda, maneja mal, estacionate de la verga" pero la peor de todas SIENTE TU GORDURA, "siente tu gordura desgraciada perra" aunque no esté gorda y sea la mujer más buena del mundo... no habrá poder humano o extraterrestre que le haga cambiar de opinión, en serio, cuando nos dicen "ayyyy pero qué bonita muchachita" nos entra por un oido y nos sale por el otro y claro, cuando no nos dicen nada todo vale una mierda y el mundo es caos. La neta, pueden comentar miles de mujeres y decir "nha, a mi no me pasa eso" pero que mentirosas son, porque todas en algún punto de nuestras vidas o período del mes sentimos cualquiera de las anteriores en diferentes grados de profundidad. It sucks.
Por ejemplo, el fin de semana me topé con mis amigas lesbianas... entonces, empezaron a debatir la clásica idea trillada de que "todos tenemos una lesbiana o jotito dentro" yo en realidad, he escuchado esa teoría tantas veces y he disertado tantas cosas alrespecto que cuando llega el momento de hablar siempre digo algo diferente e incoherente. Total, nos sumergimos en la idea de que sería divertido enseñarme a ligar mujeres lesbianas, o sea, no en cuestión cachonda de "beso a mi amiguita y le agarro la nalga" no, en una cuestión seria y formal, en un ámbito full of lesbians. Al principio fué dificil porque en realidad la mayoría tenía un pésimo gusto para vestirse... asi como super fresas o super masculinas, o bueno, no me convencían del todo pero como ya tenía unos drinks, valor me sobraba y, no dejaba de pensar... "Pero claro que ahorita va caer una desgraciada.... claro, si yo soy hermosa, bellísima, claro... sí". PUES... me presentan a una, a otra, a otra y yo porsupuesto que ni me acordaba de sus nombres, OBVIO, yo estaba muy peda... y seguían las mujeres desfilando, hasta que por fin me puse a semi platicar con una que disque era periodista y ya sabes, ella muy en su papel de mujer lesbiana de mundo, asi que me comporté amable, derrepente la seguía sin ser acosadora... y ella tomaba esas actitudes divescas de "ay es que mi amiga me espera..." total, yo pensé ULTIMADAMENTE: Ni que estuvieras tan chingona, y seguí bailando, bebiendo, y posando. Derrepente intentaba buscarle la mirada o hablar un poco más con ella pero, ella mas bien se comportaba de maneras extrañas, no sabía que pedo pues y despues de media fiestas la mandé mucho a la chingada. Pasaron las horas, yo seguía bailando y derrepente... se me acerca ésta misteriosa mujer y me lanza solamente una leve sonrisita coquetona. O sea, ¿si me entienderon? estuve toda la noche coqueteandole, buscandola, siendo amable y ésta perra lésbica me empieza a tomar en cuenta cuando casi la fiesta terminaba!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!... ¿y qué esperaba, que la siguiera y le limpiara sus zapatos Andrea? Fué uno de esos momentos en donde pensé que ser un hombre heterosexual es una MIERDA, o sea, los hombres viven esas cosas? tienen que pasar horas adulando, cortejando, buscando, pero... Dios mío... Dios... si me lees... ¿qué le estas haciendo a los hombres? éstas mujeres locas los estan cansando... pobrecitos, pobrecitos, en serio, pobrecitos los hombres... ellos no son malos pero ésta clase de mujeres pueblerinas y apretadas los vuelven loquitos. Ay, es que no hay nada como un hombre... chingado, que rico, un hombre... grrrrrrrr

4 comentarios:

Nicotina Producchions dijo...

tienes una forma de desir las cosas muy buena!!, no termina de ponerse grasioso ni serio jejeje, me llevo un par de cigarros y un porro, pero me entretuve con tus pensamientos... buenas letras!!!

CadávEr Muerto dijo...

Las divas, neúróticas y reinas del drama, son como Kriptonita para mí (por mi baja autoestima nunca me compararía en virtudes con un súper hombre -ya sea el del cómix o el concepto del filósofo nihilista-, pero en debilidades sí, jejeje)... así que no te preocupes tanto por los hombres, a muchos nos encanta sufrir bonito, jejeje. Y no mames, me cagué de risa (no literal y escatologicamente) con eso de la lesbiana de mundo, jajaja.. he conocido muchas así, jejeje. Mmm.. de hecho, hay demasiadas lesbianas en mi vida, quizá eso explica que sigo soltero, jajaja.

CLICK CLICK... dijo...

Es claro que yo podría decir "ah, mujeres, deliciosas mujeres", verdad? Gracias por pasar y comentar... cual de las dos corbatas rojas te gustó mñas?

Anónimo dijo...

Jajajajajajajaj. Ok. Es un placer muy agradecible (me vale si no existe la palabra) leer`textos asì: sinceros, poderosos, profundos, lùdicos. Osèase: chingones. De esos que uno lee y no puede parar y conforme pasa la lectura uno se da cuenta que mientras se caga de la risa van cayèndole dos o tres veintes chidos. Ademàs, como miemmbro del club de los masculinos, pos siempre es un placer conocer un poquito màs la forma de pensar de esas Otras que son las mujeres. Sobre todo si son mujeres tan chingonas como tù. Besitos. :-)