martes, 24 de noviembre de 2009
martes, 3 de noviembre de 2009
curioso, eh?
domingo, 1 de noviembre de 2009
Eres una falla del sistema cardíaco
Uno conoce mucha gente, todo el tiempo, sobretodo cuando se es joven y llegas a considerarlo como un pasatiempo divertido. Después creces, te conviertes en un profesional en algo o bien, un mediocre en varias cosas, de todos modos aunque creas que es una pérdida casual de la esperanza, no es así. No, mira, es tan similar al ciclo del agua, la reproducción y la evolución humana. Recién empiezas a educarte y descubres que el sistema ha creado unos cuantos monstruitos por ahí, digamos, unas cuantas manzanas podridas. Desafortunadamente siempre te reencuentras con esas manzanitas una y otra, y otra vez, de tal modo que: a) se tiene muy mala suerte, b) el sistema en verdad ha generado un control masificado del pensamiento o c) la irremediable esquizofrenia/paranoia nos mantiene ciegos.
La cuestión es que cuando la gente es hijodeputa no es porque el catolicismo los corrompió, o porque santa nunca les llevó los regalos que pidieron en Walmart, no, la gente es hijadeputa porque así lo decide, conciente o inconcientemente. La gente decide simplemente utilizar el excremento mañanero cual pintura de acrílico y a veces, -muy de vez en cuando- nuestros rostros son los lienzos perfectos para llevar a cabo el excelentísimo cuadro del caos.
¿Cuál es mi punto, no? Se estarán preguntando, digo, si es que llegaron hasta esta parte de la entrada: ni si quiera nosotros mismos nos salvamos de nuestra humanidad. Nos lastimamos, nos herimos, nos creamos y matamos mutuamente, todo el tiempo, aún así ingenuamente creemos en el amor.
Es verdad que no son solamente unas cuantas manzanas podridas, son cultivos enteros, podridos y ni modo, a veces nos entra el hambre. La pregunta es: ¿Cuántas chupadas se le tiene que dar a una tutsi pop para llegar al chiclocentro? Porque yo ya llevo como mil y no más no siento el chiclito.