Me gustaban esos tiempos en donde al menos podía brindar con un par de lágrimas;
ahora es como si mi alma se hubiera quedado sin el vino de despedida.
(De cualquier modo es un viento muy frío...)
Surrealismo cotidiano con tintes pseudo feministas y desplantes pre menstruales
2 comentarios:
Me gusta tu blog y me gustas tú, que lejos queda Sonora chingao.
Señorita, brinde por ese vino que ya no viene; dibuje con sus labios los contornos de mi copa, el Vino Blanco lo cura todo. Escriba ninfómanamente, este que la lee se quita el condón ante sus textos.
JD Capiello
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